Cables que por su construcción presentan una gran flexibilidad y larga duración frente a la corrosión. Utilizándose principalmente en cerramientos cinegéticos, justo pegados a la tierra, para evitar que los animales (sobre todo cerdos y jabalíes) levanten la parte inferior de la malla.
Para su colocación, se recomienda anclarlos al suelo con alcayatas de ángulo o corrugado de unos 40-50 centímetros